Podríamos resumirlo en los siguientes titulares:
- Vacío legal.
- Información y concienciación.
- Precio y calidad del servicio.
1. En primer lugar cabe destacar a día de hoy la existencia todavía de un vacío legal en la materia. A pesar de la aprobación hace un año del Real Decreto estatal, corresponde a las comunidades autónomas la regulación de aspectos tan importantes y básicos como la inspección, el control y el registro entre otros. En el caso andaluz seguimos a la espera de la adaptación del decreto 169/2011 que regule en su totalidad lo establecido en dicho Real Decreto. Ante este vacío legal es difícil que se pueda regularizar con normalidad todo el proceso. Esto lleva al usuario a estirar al máximo posible los plazos para su elaboración e incluso a evitar realizarlo.
2. La transposición de las directivas europeas referentes a esta materia en concreto llegaron a nuestro país tarde y mal. Caracterizándose desde el primer momento en una generalizada desinformación del ciudadano de a pie que en la actualidad y en la mayoría de los casos, sigue sin entender la necesidad y la importancia de este documento. Esto ha dado lugar a que en líneas generales se siga viendo el certificado energético como una tasa o impuesto innecesario e inexplicable. No obstante el fondo de la cuestión es mucho más profundo ya que no hablamos sólo de información sino de concienciación, y esto sin duda, es un proceso a medio y largo plazo. En este sentido internet y las nuevas tecnologías están jugando un papel muy importante en la difusión y en hacer llegar al usuario términos como eficiencia energética, desarrollo sostenible y otros tan importantes como la llamada pobreza energética, hasta hace poco desconocidos por muchos. Y en hacer ver por ejemplo, como la realización de un certificado energético global de todo un edificio es mucho más interesante que uno individual (más económico, con información más útil y dando la posibilidad de acceder a ayudas públicas en materia de rehabilitación).
3. La escasez de trabajo en el sector y esta nueva oportunidad ha suscitado la proliferación de múltiples profesionales, sociedades y plataformas online que ofertan estos servicios. Sociedades y plataformas de nueva creación y otras que han redirigido su negocio a este nuevo mercado (fundamentalmente inmobiliarias y tasadoras muy vinculadas a las entidades financieras). Esto ha dado lugar a un descenso paulatino en el precio por realizar este servicio que alcanza en estos momentos unos niveles peligrosamente bajos muy por debajo del valor real de mercado en costes y tiempo empleado. Convirtiéndose el asunto en una guerra sin cuartel al mejor postor cuya consecuencia directa es en términos generales una bajada en la calidad del servicio y una mala praxis en la elaboración de este documento. Todo ello agravado y fomentado por la picaresca, y el vacío legal comentado anteriormente. Cuando todo se regularice (lo cual deseamos se produzca lo más pronto posible) no nos sorprenderá que se tengan que reelaborar y volver a hacer muchos de los trabajos realizados hasta la fecha.
En este sentido nuestra filosofía es clara, a la espera de que todo se regularice, nuestros esfuerzos van encaminados a intentar concienciar del valor real de este documento, a no entrar en la medida de lo posible en esta batalla de precios y a ofrecer un servicio de la mayor calidad y atención personalizada.
(Desde MARTIN RESTOY eficiencia + energía + arquitectura, llevamos a cabo el Certificado de Eficiencia Energética de Edificios según el RD 235/2013, llevando a cabo la tramitación y el registro en el organismo correspondiente de la Junta de Andalucía y proporcionando la Etiqueta Energética según modelo oficial del Ministerio de Industria, Energía y Turismo).
3. La escasez de trabajo en el sector y esta nueva oportunidad ha suscitado la proliferación de múltiples profesionales, sociedades y plataformas online que ofertan estos servicios. Sociedades y plataformas de nueva creación y otras que han redirigido su negocio a este nuevo mercado (fundamentalmente inmobiliarias y tasadoras muy vinculadas a las entidades financieras). Esto ha dado lugar a un descenso paulatino en el precio por realizar este servicio que alcanza en estos momentos unos niveles peligrosamente bajos muy por debajo del valor real de mercado en costes y tiempo empleado. Convirtiéndose el asunto en una guerra sin cuartel al mejor postor cuya consecuencia directa es en términos generales una bajada en la calidad del servicio y una mala praxis en la elaboración de este documento. Todo ello agravado y fomentado por la picaresca, y el vacío legal comentado anteriormente. Cuando todo se regularice (lo cual deseamos se produzca lo más pronto posible) no nos sorprenderá que se tengan que reelaborar y volver a hacer muchos de los trabajos realizados hasta la fecha.
En este sentido nuestra filosofía es clara, a la espera de que todo se regularice, nuestros esfuerzos van encaminados a intentar concienciar del valor real de este documento, a no entrar en la medida de lo posible en esta batalla de precios y a ofrecer un servicio de la mayor calidad y atención personalizada.
(Desde MARTIN RESTOY eficiencia + energía + arquitectura, llevamos a cabo el Certificado de Eficiencia Energética de Edificios según el RD 235/2013, llevando a cabo la tramitación y el registro en el organismo correspondiente de la Junta de Andalucía y proporcionando la Etiqueta Energética según modelo oficial del Ministerio de Industria, Energía y Turismo).
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